Bodas de sangre de García Lorca

Trama de Bodas de sangre de Lorca

Cortijo del fraile
Cortijo del Fraile, en Níjar, Almería. En sus proximidades ocurrió el crimen de Níjar que inspiró Bodas de sangre.  Antonio Cañas Vargas / Flickr

La tragedia Bodas de sangre (1931) es una de las obras de teatro más célebres de Federico García Lorca, quien se inspiró en el evento real del crimen de Níjar sucedido en 1928. La obra sucede en esa misma época en la Andalucía rural.

El tema principal de la obra es la dualidad entre la vida y la muerte. También hay tradiciones de mitos y leyendas que enriquecen el escenario donde los sucesos tienen lugar. En esta obra se ven muchas costumbres rurales y cobra especial importancia la simbología del cuchillo, presente en otras obras de Lorca.  Otros temas son el matrimonio por interés versus el verdadero amor. 

Argumento

La obra se divide en tres actos, y cada acto en cuadros. El primer acto tiene tres cuadros y el segundo y tercero tienen dos cada uno. A continuación el resumen del argumento por actos.

1. Acto primero

La obra inicia con una conversación entre el novio y su madre, en la que planean pedir la mano de su novia. Cuando el novio está a punto de salir a la viña, le pide una navaja a su madre, pero ella, asustada, se rehusa al inicio, recordando la muerte violenta de su esposo y otro de sus hijos.

Después de salir el hijo, la madre se queda hablando con la vecina sobre la novia, a quien aún no ha conocido. La vecina le cuenta que la señorita había tenido un noviazgo con Leonardo Félix, hijo de la familia responsable de la muerte de su esposo e hijo. Esta información la inquieta mucho, pero la relación ocurrió años atrás y Leonardo ya se ha casado y tiene un hijo.

En la próxima escena, la suegra de Leonardo y su esposa están cantándole una canción de cuna a su hijo; ésta que presagia la tragedia que está por ocurrir:

"Duérmete, rosal,
que el caballo se pone a llorar.
Las patas heridas,
Las crines heladas,
dentro de los ojos
un puñal de plata.
Bajaba al río.
¡Ay, cómo bajaban!
La sangre corría
Más fuerte que el agua."

Mientras que la suegra va a acostar al niño, Leonardo le dice a su mujer que ha tenido que ponerle nuevas herraduras al caballo porque últimamente se han caído en repetidas ocasiones. La mujer cree que es porque usa el caballo demasiado, pero él lo niega. Ella dice esto basada en que algunas vecinas lo vieron en los secanos el día anterior y porque el caballo había llegado muy sudado. Leonardo dice que no fue él. 

A la casa de Leonardo llega una muchacha que vio al novio y a su madre comprando cosas para la novia, pero Leonardo le contesta bruscamente que no le interesa saber qué le han comprado y que la novia es "de cuidado". Entonces la suegra le recuerda que tuvo un noviazgo con ella, y su mujer comienza a llorar.

2. Acto segundo

El acto segundo trata del viaje del novio y su madre. Estos viajan diez leguas para pedir la mano de la novia, quien vive con su padre en los secanos. El padre les da su bendición y la novia, aceptando, dice estar segura de su respuesta.

Tras la visita del novio, la criada, curiosa, quiere ver los regalos. La novia no muestra ningún interés en abrirlos por lo que la criada le dice: "parece como si no tuvieras ganas de casarte", y en seguida le cuenta que vio a Leonardo en su caballo fuera de su ventana a las 3:00 de la mañana. Al principio la novia no lo cree, pero esa noche Leonardo aparece de nuevo fuera de su ventana. 

El día antes de la boda, la criada está peinando a la novia y hablándole del casamiento, pero la novia se muestra molesta y tira su corona de azahar al suelo. Luego dice que aunque quiere a su novio, casarse es un paso muy importante.

Esa mañana, Leonardo es el primer invitado en llegar y le pregunta a la novia: "¿Quién he sido yo para ti?". También le pregunta por el azahar, símbolo de la pureza. La novia le pide que se vaya, diciendo:

"No puedo oírte.
No puedo oír tu voz.
Es como si me bebiera una botella de anís y me durmiera en una colcha de rosas.
Y me arrastra, y sé que me ahogo, pero voy detrás".

La criada trata de interrumpir la conversación, pero Leonardo le asegura que ésta será la última vez que van a hablar, porque a pesar de su atracción mutua, Leonardo no tiene pensado, aún, interponerse entre los novios y dice: "Yo me casé. Cásate tú ahora".

A la madre del novio no le agrada que Leonardo y su mujer vengan a la boda, pero el padre de la novia le dice que los Félix son familia y es un día para perdonar, a lo que la madre responde: "Me aguanto, pero no perdono".

3. Acto tercero 

Los novios se casan, pero en medio de la celebración la novia le dice a su nuevo marido que necesita descansar por un rato. Sin embargo, poco después descubren que ha huido con Leonardo. El novio sale a caballo en busca de la pareja.

La próxima escena toma lugar en un bosque, un marcado contraste con las tierras áridas dónde vive la novia. Mientras unos leñadores están hablando de la huída de la pareja, aparece la luna personificada y dice:

"No quiero sombras. Mis rayos
han de entrar en todas partes,
y haya en los troncos oscuros
un rumor de claridades,
para que esta noche tengan
mis mejillas dulce sangre,
y los juncos agrupados
en los anchos pies del aire
¿Quién se oculta? ¡Afuera digo!
¡No! ¡No podrán escaparse!
Yo haré lucir al caballo
una fiebre de diamante."

También llega una mendiga, representación de la muerte y dice:

"Abren los cofres
y los blancos hilos
aguardan por el suelo de la alcoba
cuerpos pesados con el cuello herido".

La luna planea iluminar la escena para que el novio descubra a la pareja y la mendiga pueda acabar con ellos. Aparecen en la escena la novia y Leonardo, y ella le dice que para regresar con el novio tendrá que ser a la fuerza. La novia decide quedarse con Leonardo y ambos afirman que sólo la muerte los podrá separar. Finalmente, el novio los encuentra y se escuchan unos gritos, pero las muertes del novio y de Leonardo toman lugar fuera de la escena. Al final, entra la mendiga, se pone de espaldas y abre su manto como un pájaro con alas inmensas.

En la próxima escena, una niña y unas muchachas están hablando de la boda cuando llegan la mujer y la suegra de Leonardo, quien le dice a su nuera:

"Sobre la cama
pon una cruz de ceniza
donde estuvo su almohada".

Luego aparece la mendiga en la puerta de la casa y las muchachas le preguntan si viene del camino del arroyo. Ella les contesta que sí y que vio a dos hombres muertos.

Al final de la obra, la vecina está en la casa de la madre del novio, y llega la novia cubierta en sangre. La madre la golpea, y la novia le dice que ha venido a que la maten y explica lo ocurrido. También le jura que aún es una mujer honrada, pero la madre le contesta que no le importa su honradez ni que quiera morirse, porque su hijo está muerto. La obra termina con una especie de adoración al cuchillo que recitan la madre y la novia.

Personajes

Leonardo es el único personaje con nombre propio en la obra. Los demás personajes principales son la novia, la madre y el novio. Los secundarios son la mujer de Leonardo, la muerte, la luna, la criada, la vecina, la gente del pueblo y el padre de la novia.