Delmira Agustini

Delmira Agustini
Delmira Agustini. Wikimedia

Introducción:

La uruguaya Delmira Agustini (1886-1914) fue una de las pocas mujeres poetas de su época, pero una de las figuras de mayor vigencia del modernismo hispanoamericano. Y lo que es aún más impresionante es que llegó a ser una poeta reconocida--hasta elogiada por Rubén Darío--sin estudios universitarios y sin muchos años de vida. La poeta murió trágicamente a los 27 años.

Infancia:

Nació en Montevideo, Uruguay en una familia acomodada. Tras ver que la niña tenía una inteligencia natural, sus padres se aseguraron de que no le faltara nada en su educación, y estudió clases de francés, piano y arte (todo en su casa, como de costumbre para las niñas de ese entonces). Vivió una infancia bastante aislada de otros niños de su edad, y de adolescente prefería pasar el tiempo leyendo, escribiendo o tocando piano a solas. A los 10 años ya escribía poemas, y a los 16 años comenzó a publicar en revistas.

La joven poeta:

En 1907, publicó El libro blanco, su primer poemario que fue muy bien recibido por la crítica, y que lanzó su nombre a la fama. Sin embargo, el erotismo de su lírica fue desconcertante para la sociedad de ese entonces, por lo que muchos críticos hicieron hincapié en su belleza física en lugar de sus versos.

Tras publicar su segundo libro, Cantos de la mañana (1910), en el que podemos observar una depuración del lenguaje, Agustini llegó a conocer a otros intelectuales de la época, incluyendo a Rubén Darío, quien escribiría el prólogo lírico "Pórtico", de Los cálices vacíos (1913), su tercer libro y el más erótico. En una nota en este libro, Agustini anunció que estaba escribiendo su próximo poemario Los astros del abismo, pero estos versos no llegaron a ver la luz del día hasta que su publicación póstuma en Obras completas (1924).

En 1913 se casó con Enrique Job Reyes, quien venía de su mundo intelectual, pues se dedicaba a comprar y vender caballos. Según testimonios, Reyes no dio importancia al talento de Agustini y de hecho quería que dejara la poesía después de casados. No es sorpendente que el matrimonio duró muy poco. Agustini le pidió el divorcio depués de un mes y medio de casados. Para complicar la situación aún más, Agustini ya había comenzado a intercambiar cartas románticas con el escritor argentino Manuel Ugarte. Pero Reyes no pudo soportar el abandono de Agustini. Le disparó dos tiros a la cabeza y de inmediato se suicidó.

Rasgos de su obra poética:

Evasionista y onírico
Agustini es modernista pero, a diferencia de otros escritores de esta corriente, no acude al parnasianismo, como Darío, ni al simbolismo hermético, como Lugones. Sin embargo, es modernista en la forma en que evade la realidad del mundo y acude a los sueños. Hasta el erotismo de sus poemas no es realista, sino onírico y sobrehumano. A pesar de su refugio en el mundo de los sueños, no renuncia a la realidad por completo. La realidad y el sueño se alternan. Por ejemplo en el poema “Las alas”, de Cantos de la mañana, dice el yo poético dice que tenía alas (“¿Te acuerdas de la gloria de mis alas?”), pero al despertarse ya no las tenía.

En el poema “Vida", del mismo poemario, yuxtapone lo terrenal y lo celestial:

      Vengo a ti en mi deseo
      como en mil devorantes abismos, toda abierta
      el alma incontenible . . .
      ¡Y me lo ofreces todo! . . .
      Los mares misteriosos florecidos en mundos
      los cielos misteriosos florecidos en astros
      ¡los astros y el mundo!
      . . . Y las constelaciones de esp��ritus suspensas
      entre mundos y astros
      . . . Y los sueños que viven más allá de los astros,
      más acá de los mundos . . .

Sensualidad
Con el erotismo de sus versos, Agustini invierte los roles tradicionales, adelantando el tópico de la mujer como sujeto y el hombre como objeto de deseo. Este cambio de roles reaparece unos 70 años después, en el poema “Calvin Klein, underdrawers” de Ana Rossetti. Este ejemplo de Agustini es del poema "Visión", de Los cálices vacíos:

      Y era mi mirada una culebra
      apuntada entre zarzas de pestañas,
      Al cisne reverente de tu cuerpo.
      Y era mi deseo una culebra
      glisando entre los riscos de la sombra
      a la estatua de lirios de tu cuerpo!

Yuxtaposición de calidades estéticas opuestas
Al lado de imágenes de belleza, a veces aparecen figuras poco poéticas. Por ejemplo en “Vida”, de Cantos de la mañana dice: “Vengo a ti en mis heridas, como al vaso de bálsamos”. El vaso de bálsamos no es lo que generalmente se considera una imagen poética.

Pesimismo
El mundo de la poesía de Agustini es tormentoso y oscuro. Un ejemplo es el poema "Lo inefable", de Cantos de la mañana.

      Yo muero extrañamente...No me mata la Vida,
      no me mata la Muerte, no me mata el Amor;
      muero de un pensamiento mudo como una herida...
      ¿No habéis sentido nunca el extraño dolor

      de un pensamiento inmenso que se arraiga en la vida,
      devorando alma y carne, y no alcanza a dar flor?

Idealista
Podemos ver la influencia de Nietzsche en el idealismo de sus poemas. El hombre de sus visiones eróticas es un Superhombre (Nietzsche hablaba del Superhombre, es decir un humano superior). El yo lírico busca un hombre que supera lo humano, un amante ideal. Por ejemplo en el poema “Vida”, que ya citamos, aparece su erotismo y ese amante superhumano que le da todo y satisface todas sus necesidades.